Por obras de mejora el Punto de Información de Aravaca permanecerá temporalmente cerrado. Está operativo el Puesto de la Estación Colonia Jardín. Para más información, por favor pulse los interfonos de las paradas. Disculpen las molestias.
India, el segundo país más poblado del mundo y con la línea ferroviaria más extensa del planeta, cuenta solamente con una red tranviaria ubicada en una de las ciudades con mayor caos circulatorio del país, Calcuta.
El 24 de febrero 1873 se puso en funcionamiento el primer tranvía de la ciudad que funcionaba con tracción animal, pero no fue hasta 1902 cuando se electrificó el sistema. La compañía que gestiona la red, Calcutta Tramways Company (CTC), llegó a disponer de una flota de 450 vehículos en los años 60. En la actualidad, cuenta con una longitud de unos 57,17 kilómetros y dispone de un total de 270 vehículos. Cada coche tiene 2 compartimentos con una capacidad para 54 pasajeros pero puede llegar a transportar cómodamente hasta 120 viajeros en hora punta.
Este sistema de transporte, empleado fundamentalmente en los desplazamientos diarios de los trabajadores, contribuye a aumentar el encanto de la ciudad a la vez que ayuda a la reducción de la contaminación de una de las urbes más afectadas por este problema.
Múnich es, tras Berlín y Hamburgo, la tercera ciudad más grande de Alemania y la capital de la región de Baviera. Para la mayoría de los extranjeros Múnich es la ciudad de la cerveza y de su máxima representación, el Oktoberfest. Y para los más futboleros es la ciudad que acoge el futurista estadio del Bayern, el Allianz Arena.
Sin embargo, más allá de la cerveza, del estadio de fútbol o de los pintorescos mercados navideños, se erige una ciudad que aúna modernidad y tradición bávara entre sus estrechas calles, parques y plazas. Según un estudio publicado en 2009, Múnich es la ciudad alemana con mayor calidad de vida de Alemania. Por ello, desde Metro Ligero Oeste os animamos a viajar a la capital bávara y os dejéis encandilar por sus plazas y edificios góticos.
Adentrarnos un poco más en los orígenes y costumbres de la ciudad es posible gracias a los 79 kilómetros de raíles del tranvía que vertebran y dan vida a la ciudad tanto de día como de noche, con sus treces líneas diurnas y cuatro nocturnas. El tranvía se convierte así en uno de los máximos aliados de un turista a la hora de recorrer la capital bávara.
El tranvía comenzó a finales de 1876 con un sistema de tracción animal y en 1895 se incorporó el tranvía eléctrico… a día de hoy sigue operativo y más vivo que nunca.
El Barrio de los estudiantes “Schwabing”; el Jardín inglés “Englischer Garten”; la Ola inmóvil del río helado; el ayuntamiento “Marienplatz” o la torre “Alter Peter”, son lugares insólitos a los que podrás llegar a través del tranvía de Múnich.
Esta ciudad debe su nombre a un monasterio fundado en el siglo VIII. Pero no sólo su nombre, sino también el origen de la famosa cerveza bávara, ya que fueron los monjes de la zona los que comenzaron a comercializarla.
¡Ánimo! Haz las maletas antes de que llegue el invierno y disfruta de una escapada al corazón de la región de Baviera.
La ciudad de Oslo está situada sobre un fiordo con el que comparte el mismo nombre. Se trata de una extensa ciudad rodeada por cerros y montaña que lberga entre los límites de la ciudad 40 islas, siendo la mayor de ellas Malmøya y 343 lagos.
Su área geográfica es excepcionalmente grande, ya que dos terceras partes de la ciudad son bosques, colinas o lagos. Una ciudad repleta de parques y áreas al aire libre, lo que le da una imagen muy green de la ciudad.
Llegar a Oslo es muy sencillo, ya que está muy bien comunicada vía aérea, marítima y terrestre. Pero moverse por la ciudad es mucho más fácil ya que tanto el metro, los autobuses, los ferris como el tranvía comparten el mismo sistema de billetes.
El tranvía de Oslo, inaugurado hace más de 100 años, tiene once líneas que conectan la ciudad. Sobre él se pueden visitar los lugares más emblemáticos de la ciudad como la Fortaleza de Akershus, situado junto al fiordo de Oslo. El lugar ideal para coger el tranvía es la Oslo S (estación central), un punto perfecto en el que comenzar tu ruta en tranvía por toda la urbe.
El tranvía no sólo vertebra las calles de la ciudad, sino que acerca a sus ciudadanos y turistas a los lugares más emblemáticos como la Ópera de Oslo, el Palacio Real o la Ópera de Vigeland.
Pero sin duda, la parada del tranvía más transitada es la del Ayuntamiento de la ciudad, que a pesar de su aspecto exterior posee un interior del edificio repleto de obras inspiradas en la historia de Noruega. Pero… ¿y por qué más es conocido este edificio? Pues porque desde 1990 en él se celebra la entrega de los Premios Nobel de la Paz.
Oslo o la ciudad de los tigres, como una vez se refirió el escritor Bjørnstjerne Bjørnson es una ciudad que alberga calles y rincones mágicos, así que si quieres conocer y recorrer muchos de ellos, no dudes en usar su Tranvía.
Coímbra es la tercera ciudad más grande de Portugal, ya que acoge a casi 144.000 habitantes. Además, es una antigua ciudad universitaria, famosa por sus calles sinuosas, su tranvía, las casas colgantes y por ser la capital del Distrito de Coímbra en Beira Litoral.
Hablamos de una pequeña ciudad que guarda entre sus estrechas calles, patios, escaleras y arcos medievales mucha historia. Bañada por el río Mondego, la ciudad fue la cuna del nacimiento de seis reyes portugueses de la primera dinastía, así como de la primera universidad de Portugal, una de las más antiguas de Europa.
Parte de su encanto reside en esa mezcla entre lo rústico y antiguo de la ciudad; sus muros, sus raíles y el ambiente joven y cultural. Se puede recorrer la ciudad caminando siguiendo los raíles del tranvía que un día surcaron los adoquines desde el río hasta la universidad… y aunque estos no estén habilitados para el uso, los viejos tranvías beige, amarillo y marrón, se pueden visitar en el Museo de los Transportes de la ciudad.
Pero la forma actual de conocer Coimbra es viajando en los trolebuses, un medio de transporte mezcla entre tranvía y autobús. Estos híbridos, que han sustituido el viejo tranvía, son eléctricos pero físicamente se parecen a los típicos tranvías.
Además de la Universidad y su biblioteca; la ruta del tranvía y el museo del transporte, Coímbra es una ciudad repleta de diversas ofertas culturales, Iglesias, conventos y un jardín botánico que no dejan indiferente a sus visitantes.
Viena, por sexto año consecutivo, ha sido elegida como la ciudad con mejor calidad de vida del mundo, según el ranking de Mercer. Una de las ciudades más sostenibles y ahora también una de las líderes en 'Smart City'.
Además Viena es una ciudad de congresos de importancia internacional y, por supuesto, un importante centro turístico de Europa. Edificios monumentales, museos y galerías con tesoros artísticos únicos de casi todos los períodos del arte de la cultura occidental, son testimonio del gran pasado de la ciudad "a orillas del Danubio Azul". El Festival de Viena y el festival de cine Viennale constituyen atracciones internacionales.
Si viajas a Viena debes conocer el centro de la ciudad. La capital austríaca tiene mucho que ofrecer y conviene visitar el centro histórico vienés de una forma diferente. Por eso, te recomendamos explorar las avenidas de Viena, la belleza de sus monumentos como la Ópera Nacional, el Hofburg, el Parlamento o el Ayuntamiento mediante el nuevo tranvía circular Ring Tram que te llevará en un recorrido por los rincones más bellos de la ciudad a lo largo de las líneas de tranvía de Wiener Linien.
Este tranvía tan especial ofrece a los visitantes la oportunidad perfecta para hacer un viaje rápido y cómodo, en el que disfrutar de todos los lugares de interés de Viena.
El Ring Tram de Viena recorre toda la calle Ring y se desplaza en intervalos de 30 minutos desde Schwedenplatz dando una vuelta alrededor de la calle. El tranvía da servicio durante todo el año en horario de 10:00 h de la mañana hasta las 17:30 h de la tarde. (En julio y agosto hasta las 19:00 horas).
En cada vagón tiene de 31 plazas y unos monitores LCD que informan sobre los aspectos más interesantes a lo largo del trayecto. Además, cuenta con auriculares que ofrecen la información en distintos idiomas. El billete, que es válido durante 24h, cuesta 9€ y para los menores de 15 años, 5€.
En definitiva, el Vienna Ring Tram es la única línea de tranvía que permite dar una vuelta por la Ringstrasse sin necesidad de bajarse y disfrutar de la vista de edificios de prestigio ubicados a lo largo del bulevar. ¡Una alternativa perfecta para adentrarse en la elegante capital de Austria surcada por el Danubio!
Oporto, la ciudad de los puentes del Duero
Conocida por su vino y una arquitectura que combina lo moderno con lo antiguo, Oporto, cuya vida gira alrededor del río Duero y de sus famosos puentes, es la ciudad reina del país luso. Elegantes barrios y villas señoriales son el contrapunto de estrechas calles y viejos callejones que han sido declarados por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
La cercanía de Oporto con España hace que sea un destino muy cómodo y atractivo y sin duda la mejor manera de iniciar este viaje en el tiempo es recorrer la ciudad en uno de los antiguos tranvías que circulan por sus calles. Tranvías salvados del desguace y recuperados del olvido suponen una manera económica, rápida y cómoda de visitar los rincones más atractivos de esta bella ciudad.
Por la ciudad circulan tres líneas de tranvía que cubren buena parte de los itinerarios turísticos más interesantes para los turistas. El trayecto de la línea 18 (Massarelos – Carmo) es sin duda uno de los más completos.
Además, Oporto cuenta con el Museo do carro eléctrico que se encuentra situado en la antigua Central termo-eléctrica de Massarelos, en el barrio de Miragia. En este museo podrás ver varias máquinas de tranvía restauradas, una exposición de uniformes originales y muchas fotografías de los conductores de tranvía que trabajaron en la compañía de transportes de la ciudad.
Sin duda, Oporto es una de esas ciudades enigmáticas dignas de visitar y en la que un viaje en tranvía complementa la experiencia.
Tranvía de París, una perfecta opción para realizar un turismo diferente
París, la ciudad de las luces, bien podría llamarse la ciudad del tranvía. Hasta mediados del siglo XX contaba con una gran red de tranvías pero en los años 50 comenzaron a sustituirse por líneas de metro, provocando así la desaparición de los tranvías. El último llegó a Versalles en 1957.
Pero a finales del siglo XX la compañía RATP se propuso volver a dotar a la ciudad de este medio de transporte cómodo, limpio y barato de construir.
El tranvía se ha impuesto a lo largo de los años porque responde a una lógica de reordenación urbana, de planificación de los transportes y de preocupaciones medioambientales.
Lástima que este tranvía no recorra el centro de París, pero el extrarradio sí. Actualmente tiene 3 líneas en funcionamiento: la T1 que comunica Saint-Denis con Noisy-le-Sec es la línea más interesante pues llega hasta la Basílica de Saint-Denis, la línea T2 que une La Dèfense con Porte de Versalles al sur de la ciudad, y finalmente la línea T3 que conecta la estación de RER Pont du Garigliano con la estación de metro Porte d’Ivry.
Turísticamente el tranvía de Paris no está explotado pero es una gran opción para aquellos que quieren salirse de las rutas más habituales y conocer paisajes mágicos.
Así que si visitas París y quieres recorrer la ciudad de un modo diferente y conocer las zonas que no suelen aparecer en las guías turísticas... ¡Súbete al tranvía!
El tranvía de Zagreb
Zagreb es la capital y la ciudad más grande de Croacia. Por sus calles circulan líneas de tranvía desde el mes de septiembre de 1891 conformando lo que hoy en día es una extensa red, de 15 líneas diarias y 4 nocturnas, que cubren más de 116 km de pistas a través de 255 estaciones. Por este motivo, el tranvía es la mejor opción para moverse por la ciudad, especialmente por el centro.
El tranvía (tramvaj) es el método de transporte por excelencia de la ciudad gracias, en parte, a sus modernos vehículos, aunque todavía circulan por sus calles algunos modelos antiguos, eso sí, todos azules; y es que la ciudad es conocida por ser la ciudad de los tranvías azules pues en 1920 fueron todos pintados de ese color, convirtiéndose así en un símbolo de la ciudad.
Para viajar en tranvía se pueden comprar billetes en los quioscos o en el propio vehículo, y el billete es válido para los transbordos que no superen los 90 minutos, aunque existe la opción de adquirir un abono de un día que sirve para todos los transportes públicos hasta las 4.00 h del día siguiente.
La mayoría de las líneas del tranvía llevan a la plaza Ban-Jelacic, una zona en la que hay numerosos comercios, tiendas de ropa, libros, discos y restaurantes. Sin duda, utilizar el tranvía en Zagreb es toda una experiencia.
Luas, el tranvía de Dublín
Por las calles del considerado como centro político, administrativo, económico, industrial y cultural de la República de Irlanda, Dublín, circula el conocido oficialmente como Luas (velocidad en irlandés), el nuevo tranvía-metro ligero en funcionamiento desde el año 2004.
Este sistema de transporte, que aporta a la ciudad un aire de modernidad, es el primer tranvía que entró en operación tras el cierre definitivo de las antiguas líneas en 1959, convirtiéndose en el orgullo del transporte público de Dublín.
El tranvía consta de dos líneas incomunicadas entre sí: una roja y otra verde. La línea roja, con 27 estaciones, conecta Tallaght (al suroeste) con The Point (al este) y resulta de gran interés turístico para llegar hasta lugares como la Destilería de Jameson, Collins Barracks (Museo Nacional de Artes Decorativas e Historia), Smithfields o la estación de tren Heuston.
Por su parte, la línea verde -de 13 paradas- comunica Brides Glen (al suroeste) con el parque St. Stephens Green.
Desde la última adquisición, el sistema dispone de 66 vehículos repartidos en 3 clases, todos ellos modelos Citadis, de la compañía francesa Alstom, capaces de alcanzar los 70 km/h en zonas sin tráfico de turismos.
Entre las curiosidades de Luas, destaca que desde que se obtiene el billete, se dispone de 90 minutos para finalizar el trayecto y, aunque el sistema es por tiempo, no se permite hacer paradas intermedias o utilizar el tiempo restante para hacer el retorno.
Budapest y el tranvía de las 40 líneas
En funcionamiento desde 1866, la red de tranvías de Budapest es actualmente una de las más grandes del mundo, con cerca de 196 kilómetros de longitud total cerca de 40 líneas.
Como si de una red de araña se tratara une casi todos los puntos de la ciudad, siendo un sistema de transporte bastante utilizado por los turistas, ya que, dependiendo de la línea, se puede hacer un recorrido por las mejores calles y atracciones de la ciudad.
El servicio comienza hacia las 4:30 h y funciona todo el día hasta las 23.00 o 24.00 h, dependiendo de la línea. Los tranvías nocturnos solo operan en determinadas líneas, con una media de cuatro servicios por horas.
En el año 2012, su tranvía número 2 -que realiza un bonito recorrido por la ribera del Danubio con paradas en el Puente de las Cadenas, el Parlamento, el Mercado Central y en todos los puntos de interés de la orilla de Pest- entró a formar parte del top 10 de los Recorridos de Tranvía más bonitos del Mundo de la revista National Geographic.
Con la llegada del invierno y coincidiendo con las fiestas, la ciudad se engalana y se ilumina especialmente. Esta decoración también llega hasta sus tranvías
El antiguo tranvía de Vigo que asoma bajo el asfalto
La Sociedad Anónima Tranvías Eléctricos de Vigo nació en el año 1912, pero no fue hasta el 9 de agosto de 1914 cuando comenzaron a circular los primeros tranvías por la ciudad. En sus inicios, contó con seis líneas pero con el paso del tiempo se convirtió en un auténtico servicio de transporte metropolitano.
El 31 de diciembre de 1968, los vigueses celebraban la entrada del nuevo año a la vez que los dos últimos tranvías regresaban a sus cocheras en lo que representó el fin del tranvía en la ciudad, 54 años después de su inauguración.
Desaparecía así un modo de transporte que se había convertido en un símbolo para los vigueses y que llegó a estar considerado como uno de los tres servicios de tranvías eléctricos más emblemáticos del mundo.
Todos los vigueses que vivieron aquella época lo recuerdan con nostalgia y los que no, tratan de imaginarse cómo aquellos vehículos podían circular por las empinadas avenidas de la ciudad olívica.
Pero el tranvía sigue presente de algún modo en las calles de este municipio. En ocasiones, al realizar excavaciones aparecen los vestigios de aquel pasado y hay quien dice que las calles de Vigo están sujetas por raíles y, cuando alguna vez se ha producido un socavón, se ha aguantado el firme gracias a los raíles Vignole y el adoquín.
El “Ding ding” de Hong Kong
Una agradable forma de visitar Hong Kong es utilizando su tranvía de doble piso.
Este divertido tranvía, cuyo 110 aniversario se celebró el pasado 18 de julio, continúa siendo uno de los medios más asequibles para visitar esta bulliciosa ciudad. Se les conoce como los “Ding ding” por ser el sonido utilizado para avisar a los peatones de su llegada. Además, destaca por ser un tranvía respetuoso con el medio ambiente ya que reduce la contaminación por ruido al mínimo gracias a su moderna tecnología.
En 1904, Hong Kong sólo disponía de 26 tranvías de un único piso. Sin embargo, éstos fueron pronto reemplazados por unos tranvías de doble piso sin techo en la planta superior. Por otra parte, en 1923 se añadieron a la flota nuevos tranvías de dos pisos, pero esta vez cubiertos. Actualmente, la red cuenta con 163 tranvías, 120 paradas y transporta una media de 230.000 pasajeros al día.
Es necesario llevar el importe exacto, HK $2.30, ya que no se devuelve el cambio, aunque también se puede pagar con la tarjeta Octopus karteen. Es llamativo el hecho de que, frente al sistema al que estamos acostumbrados, se entre por la parte trasera del tranvía y se pague al bajar por la parte delantera.
Esta antigua red de tranvía contrasta fuertemente con la moderna urbe de Hong Kong. Sin embargo, casi todos los tranvías sirven de valla publicitaria, destacando por sus llamativos colores.
Aunque su red no es muy extensa, ya que tan sólo dispone de 30 kilómetros, no cabe ninguna duda de que el tranvía de Hong Kong es una forma económica, distinta y atractiva de visitar esta ciudad.
Un poco de historia: el tranvía de la playa cántabra
Santander guarda una joya que ha levantado pasiones a lo largo de la historia: la Playa del Sardinero. Ya en el siglo XIX turistas de todos los lugares de España, e incluso del extranjero, huían del calor del verano en dirección a las aguas del Cantábrico.
Una de las principales consecuencias de este boom turístico fue la aparición y vertiginoso desarrollo del tranvía en la ciudad. En relación con su población, Santander acumuló un volumen de tranvías que poco tenía que envidiar a los de otras grandes ciudades de España. Su historia empezó de la mano del Rey Amadeo de Saboya, quien otorgó la primera concesión, que llegaría a manos del empresario Santos Gandarillas. El apellido de este conocido promotor se convirtió pronto en nombre propio de la primera línea de tranvía, “Tranvía de Gandarillas”, que unía la Calle de Hernán Cortés con la zona del Sardinero. Éste fue inaugurado en 1875 y, por aquel entonces, el servicio se realizaba con “motor de sangre”, es decir, mediante animales de tiro.
Al éxito de esta línea le siguieron otras; unas que discurrían por la ciudad, como el llamado Tranvía Urbano que se inauguró en 1883; y otras que también llevarían a los santanderinos hacia la costa, como el Tren del Túnel (o de Pombo), inaugurado en 1892. Finalmente, en 1897, un nuevo tren, el de Miranda, conectaba el centro de la ciudad con la zona del Alto de Miranda, en manos de otra compañía.
La Guerra de Cuba y la consiguiente bajada en las cifras de turismo fueron el principal motivo por el que las cuatro compañías se encontraron con difíciles situaciones económicas, que les obligaron a asociarse y modernizarse (primero mediante la máquina de vapor, después, utilizando la electricidad). Algunas de las líneas irían cayendo en el abandono hasta que, finalmente, el 15 de noviembre de 1953 circularon los últimos trenes, los de la línea de Miranda, desapareciendo el tranvía de la capital cántabra.
Un tranvía intercontinental
Estambul destaca no sólo por ser camino entre dos continentes o la ciudad más poblada de Europa, sino que además disfruta de una cómoda red de tranvía que simplifica los desplazamientos de la ciudad.
Fue a mediados de 1960 cuando las autoridades turcas consideraron que las redes de tren suponían un atraso tecnológico frente a los modernos sistemas de transporte como los coches, taxis o autobuses, situación que llevó a la desaparición de los tranvías en Estambul. Sin embargo, esta decisión dio lugar a un incremento de contaminación y tráfico con el consiguiente descenso de turismo. Una vez asumido el error, los tranvías fueron restaurados progresivamente hasta dar lugar al actual sistema de redes que cuenta con cinco líneas.
Pero si algo llama la atención de este complejo entramado es la tradicional línea nostálgica, que permanece con el material rodante de 1960. Aunque no es el método más eficiente de transporte, supone una aventura montar en este tranvía ya que no sería extraño que alguien saltara y se colgara de su puerta trasera.
Este tren, que sale desde la plaza de Taksim, recorre la calle Istiklal, un congestionado y peatonal boulevard lleno de tiendas que llega hasta la zona de Tünnel. Cuenta con 5 paradas y 1,6 kilómetros de recorrido.
Otra ventaja del tranvía nostálgico es que se paga directamente al conductor y es más barato que los demás de la ciudad.
Tal ha sido el éxito de este tranvía, que en 2003 se puso en marcha un tranvía circular cuyo material rodante fue importado de Gotha,Thurinia, Alemania. Esta nueva, a la vez que tradicional línea de tren, se conoce como la Línea T3 o Kadıköy-Moda. Recorre 2,6 kilómetros y cuenta con 10 paradas.
Un tranvía con mucho arte
A mediados del siglo XIX, comienzan a verse en la ciudad hispalense unos carromatos arrastrados por mulos o caballos percherones. El 5 de septiembre de 1887 fue el día en el que oficialmente se inauguró la red tranviaria de la ciudad compuesta por seis líneas.
Los primeros pasos para la electrificación se dieron en 1896 cuando se presentó el proyecto para proceder a la sustitución de la tracción animal. El 22 de agosto de 1899, comenzaron las pruebas del nuevo sistema eléctrico que no fue muy bien recibido por los sevillanos acostumbrados a los tranvías de tracción de sangre.
Tras pasar diversos periodos de auge y decadencia propiciados por las huelgas, la situación económica y la caída en el número de viajeros, el tranvía desapareció hacia 1964 absorbido por la promoción del autobús urbano.
Después de 46 años en el olvido, en octubre 2007,se inauguró la línea T1 del Metro de Sevilla, más conocida como MetroCentro, que conecta el Prado con la Plaza Nueva, a través de una avenida peatonalizada. La segunda fase (inaugurada el 15 de abril de 2011) amplía el recorrido desde el Prado hasta San Bernardo para conectarlo con el Metro y Cercanías de Renfe.
Desde un principio se planteó la circulación en parte del MetroCentro con algún sistema que permitiese retirar el hilo aéreo de contacto. En varias ocasiones, con motivo de la Semana Santa, el Ayuntamiento de Sevilla retiró el hilo temporalmente para permitir el paso de las procesiones.
El sistema definitivo, un referente europeo en ahorro de energía, está en funcionamiento desde la Semana Santa de 2011. Se trata del sistema de tecnología avanzada ACR (Acumulador de Carga Rápida) desarrollado y patentado por la empresa española CAF.7
Un tranvía con acento italiano
La red de tranvías de la ciudad de Milán se remonta al año 1881, cuando se inauguró la primera red de tranvía urbano de tracción animal.
Tras la II Guerra Mundial, los tranvías llegaron a ser vistos como una forma anticuada y poco flexible de transporte en Milán y por ello se llamó a su eliminación completa del centro de la ciudad y a su sustitución por una red de metro subterráneo. Hubo que esperar hasta 1994 para que se comenzase a reactivar la red de tranvías.
En la actualidad, la ciudad de Milán cuenta con un total de 19 líneas (17 urbanas y 2 interurbanas) y es uno de los servicios de transporte más populares.
Por sus calles circulan tranvías de diferentes épocas, desde los más modernos hasta los más clásicos. Los más peculiares son los tranvías de la serie 1500, compuesta por vehículos fabricados entre 1928 y 1930 y que también pueden verse en otras ciudades como Lisboa, Oporto o San Francisco.
Una buena forma de visitar la ciudad es comer en el tram ATMOsfera, un tranvía que realiza un recorrido de dos horas y media y en el que se ofrece un menú suculento compuesto de un primer plato, un segundo y postre. El tram ATMOsfera pasa por las zonas más turísticas de la ciudad como: Duomo, Columnas de San Lorenzo, Navigli, Cementerio Monumentale, Parco Sempione, Castillo Sforzesco, entre otros.
Metro Ligero oeste: El tramvia blau
Subir en el tranvía azul de Barcelona (tramvia blau) es retroceder más de cien años en el tiempo. Este tranvía fue inaugurado en 1901 para conectar la estación de trenes de la Avenida Tibidabo con el funicular. Posteriormente, fueron restaurados pero aún conservan el motor y los controles originales.
Este histórico tranvía es un superviviente de la línea antigua de Barcelona, ya que en los años 60 y 70, fueron sustituidos por autobuses en la mayor parte de la ciudad.
Su función principal es más bien turística y por eso tiene una tarifa especial. En su recorrido de 1.276 metros hacia el pie del funicular del Tibidabo, los visitantes pueden disfrutar de las construcciones modernistas y novecentistas que anticipan la naturaleza y las magníficas vistas de la ciudad.
El tramvia blau, junto con el tranvía de Sóller de la isla de Mallorca, es el único que sigue en funcionamiento de toda la primera generación de tranvías de España.
El tranvía del Rin
Basilea es una pequeña ciudad suiza bañada por las aguas del Rin y situada en la frontera con Francia y Alemania.
En esta ciudad se pueden visitar antiguos tranvías de los años veinte,que recorren los lugares más emblemáticos de la ciudad. Estos vehículos de color verde y amarillo forman parte del paisaje cultural de la región y constituyen todo un atractivo turístico.
Basilea cuenta con 12 líneas principales, dos de ellas destinadas a los turistas, los tranvías 15 y 16 que realizan una ruta panorámica por toda la ciudad. Estas líneasson gratuitas para todos aquellos que tengan la “mobility card”, una tarjeta que se suele entregar en los hoteles para viajar en transporte público.
En esta entrañable ruta se puede conocer el Rathaus (Ayuntamiento), Barfusserplatz y la estación, entre otros. El recorrido turístico que realizan estos vehículos es circular y parte desde diferentes puntos de la ciudad. Es una buena forma de ver las principales atracciones de Basilea en tan sólo 45 minutos.
El tranvía bi-piso de Reino Unido
En la pequeña localidad costera de Blackpool, al noroeste de Inglaterra, se encuentran los tranvías Serie 700 “Ballon car”, un modelo de dos pisos que constituye el único que superviviente de la primera generación de tranvías del Reino Unido.
Esta línea, que transcurre desde Blackpool hasta Fleedwood, se inauguró en 1885 y hoy es un reclamo para los turistas durante los fines de semana, festivos y verano.
En los años 30, se llevó a cabo un plan de modernización y se transformó el piso superior de estos tranvías en descapotable.
En el 2011 se modernizaron varios de estos vehículos de forma que pudieran operar eficazmente, incorporando accesos para personas con movilidad reducida y pantallas con información para los pasajeros.
Cada año, estos tranvías son los protagonistas del “Tram Sunday”, un evento que se celebra el tercer domingo de julio en el marco del Festival del Transporte de Fleetwood y donde miles de visitantes se acercan para admirar estos tranvías con historia.
Esta localidad del Reino Unido, junto con Hong Kong y Alejandría, son de las pocas ciudades del mundo que disponen de tranvía de dos pisos.
Un tranvía de alta costura
En Francia, la moda va más allá de las pasarelas.
La ciudad de Montpellier cuenta con dos líneas tranviarias, la 3 y la 4 de su red, cuyo diseño interior y exterior ha sido ideado por el diseñador Christian Lacroix.
La línea 3 conocida como la “Ruta del mar” recorre las localidades próximas a la playa. Para este tranvía, Lacroix se ha inspirado en el mundo submarino en una decoración en la que predominan los peces multicolores, las estrellas, los corales y las perlas en un guiño al litoral mediterráneo. El mar también está presente en la decoración exterior de todos los tranvías que circulan por esta ruta costera, donde Lacroix ha evocado un mundo submarino habitado por distintos tipos de peces multicolores, estrellas, corales y perlas.
En su interior se han utilizado los tonos azules evocando al mar y se han instalado agarraderas onduladas inspirándose en el movimiento de los animales marinos.
La línea 4, que recorre 8,5 kilómetros del centro urbano de Montpellier, tiene un estilo neobarroco en el que priman los tonos cálidos que simbolizan el radiante sol de la costa azul. Todos sus vehículos están inspirados en grabados antiguos y en su exterior cuentan con telas brillantes y piedras preciosas combinadas con motivos arquitectónicos de la región.
WASHINGTON ESTRENA TRANVÍA EN PRIMAVERA
Después de cincuenta años, la capital estadounidense se prepara para incorporar a sus calles este entrañable medio de transporte esta primavera.
Además de acortar distancias, el nuevo tranvía brindará a sus nuevos pasajeros la oportunidad de disfrutar de la ciudad desde una nueva experiencia que los washingtonianos dejaron para el recuerdo hace más de medio siglo. No obstante, los más impacientes ya han podido deleitarse con un adelanto del futuro tranvía teñido de colores navideños. El rojo y blanco de Santa Claus caracterizarán al nuevo transporte a juego con los colores del popular autobús Circulator de la ciudad.
Monumentos de blanco neoclásico, arquitectura federal y los locales más alternativos de la ciudad estadounidense esperaban con ansia la vuelta de este medio de transporte, que realizó su último viaje en el invierno de 1962. Ahora, Washington ya no tiene nada que envidiar a ciudades como Portland, Seattle, y Tampa que, en el siglo pasado, tomaron la decisión de sustituir este medio por una flota de autobuses urbanos.
El nuevo proyecto permitirá a locales y visitantes alternar el tranvía con otros medios como el coche particular o el servicio de alquiler de bicicletas.
A su regreso, el nuevo tranvía encontrará una ciudad más moderna, más segura y muy probablemente, vendrá para quedarse.
Metro Ligero Oeste: El tranvía costero belga
Una forma diferente de conocer Bélgica es viajar por su costa.
El Kusttram es el tranvía costero que conecta las ciudades y los pueblos de toda la costa belga de Flandes Occidental.
El Kusttram recorre 68 kilómetros por la costa del Mar del Norte, lo que la convierte en la línea de tranvía más larga del mundo. El trayecto entero dura algo más de dos horas y cuenta con 70 paradas, desde la localidad de De Panne, muy cerca de la frontera francesa, hasta Knokke, situado casi en Holanda. Este servicio de transporte público tiene una frecuencia de 10 minutos durante la temporada alta estival, periodo durante el que más de 3 millones de pasajeros lo utilizan.
El Kusttram es uno de los pocos tranvías con carácter interurbano que quedan en funcionamiento a nivel global. La primera sección de la vía fue inaugurada en 1985. Actualmente, la responsable de su funcionamiento es una compañía de la región valona.
El precio del tranvía es de 5 euros por un billete de un día, con el cual puedes subir y bajar cuantas veces quieras. El billete de 3 días cuesta 10 euros.
Esta excursión permite adentrarse en pequeñas localidades costeras con mucho encanto, como Ostende o De hann, que a veces quedan a la sombra de los lugares más turísticos como Bruselas, Brujas o Gante.
El tranvía del Golfo Sarónico
En Grecia, la forma más rápida de llegar a la costa desde el centro de la ciudad es subiéndose al tranvía que conecta Atenas con los barrios costeros de la ciudad.
En concreto, el tranvía de la costa llega hasta las playas de Glyfada y Voula en uno de los recorridos más originales por el Golfo Sarónico. Las dos líneas que parten desde la Plaza de Syntagmatranscurren paralelas hasta llegar a la costa, atravesando nueve municipios.
Los primeros tranvías de la ciudad comenzaron a circular por sus calles en 1882, cuando todavía eran de tracción animal. Tras su electrificación, este medio de transporte vivió su auge con los Juegos Olímpicos.
El billete se puede combinar con otros medios de transporte permitiendo viajar durante unos 90 minutos en autobuses, metro y tren.
Además de las maravillosas vistas que se pueden admirar durante su recorrido, viajar en este tranvía permite al viajero beneficiarse de numerosos descuentos en la temporada teatral.
Recientemente, se ha firmado el contrato para la ampliación de la red con 5,4 nuevos kilómetros, que discurrirán desde el actual término de Neo Faliro, en la zona este de El Pireo, y atravesarán el centro urbano, antes de terminar en la estación de Akti Posidonos. El nuevo recorrido contará con doce estaciones y transportará alrededor de 35.000 viajeros diarios.
El tranvía colgante de Alemania
El tranvía de la ciudad alemana Wuppertal es uno de los más llamativos del mundo. El ‘Schwebebahn de Wuppertal’ es el único ferrocarril urbano colgante del continente europeo, y pese a esta interesante peculiaridad, es un tren casi desconocido.
Este tranvía no circula por tierra sino que lo hace colgado de raíles. Se desplaza por una ruta de 13,3 km de longitud, a unos 12 metros por encima de la superficie del río Wupper y aproximadamente 8 m por encima de las calles de la ciudad.
El ‘Schwebebahn de Wuppertal’ fue inaugurado en 1901 por el emperador alemán Guillermo II. Este tren colgante, diseñado por Eugen Langen, había sido concebido originalmente para la ciudad de Berlín. A pesar de que es el sistema de transporte por monorraíl más antiguo del mundo, todavía hoy está en uso en esta ciudad alemana.
En su recorrido completo, de unos 30 minutos de duración, se encuentran veinte estaciones.
Este tren colgante, que puede llegar a transportar hasta 75.000 personas al día, es uno de los principales emblemas y atractivos turísticos de la ciudad de Wuppertal.
Melbourne, la ciudad de los tranvías
Melbourne es la segunda ciudad más grande de Australia después de Sídney en cuanto a población. Se caracteriza por su arquitectura que mezcla lo antiguo con lo moderno, por su gran cantidad de jardines y su extensa red de tranvías. Además, ha sido reconocida como capital del deporte y la cultura de Australia.
En el año 2011 fue elegida como mejor ciudad del mundo para vivir por sus altos niveles de calidad de vida y bajos ratios de pobreza.
A finales del siglo XIX se estableció el sistema de transporte público y los trenes y tranvías se convirtieron en imprescindibles para viajar a los suburbios de la ciudad.
Melbourne está repleto de tranvías, de hecho, cuenta con la mayor red de tranvías del mundo. Una de las mejores formas de conocer Melbourne es gracias al City Circle Train, un tranvía gratuito diario que acerca a los visitantes a los principales atractivos turísticos de la ciudad. Funciona con el sistema hop on hop off, para poder subir y bajar donde se desee. Los tranvías son uno de sus símbolos de identidad de la ciudad.
Otra de las opciones que ofrece Melbourne es el Colonial Tramcar Restaurant. En este tranvía histórico convertido en restaurante los viajeros pueden degustar los mejores platos de la cocina australiana, al mismo tiempo que disfrutan de un recorrido turístico por la ciudad. El Colonial se inauguró en 1983 y fue el primer tranvía-restaurante del mundo.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de Sóller
Montar en el tranvía de Sóller (Mallorca) es iniciar un viaje en el tiempo. Es un tranvía como el de las películas en blanco y negro. Subirse es respirar un olor a madera que impregna una atmósfera ideal para recorrer el camino entre Sóller y su puerto.
Fue el 4 de octubre de 1913 cuando se inauguró el primer tranvía eléctrico de Mallorca, que fue la solución para dar continuidad a la línea de tren que conectaba Palma con Sóller y que no podía continuar hacia el puerto por problemas de espacio, ya que las vías del tren tenían que atravesar el pueblo y esto no era posible. La línea de tranvía fue la solución.
En sus inicios, el tranvía estaba pensado para transportar pasajeros, pero las necesidades de la época lo convirtieron en un medio de transporte de mercancías hacia el puerto. Pescado, carbón, incluso material explosivo como minas y torpedos eran remolcados desde la estación de Sóller hasta el puerto.
El encanto que aún mantiene el tranvía de Sóller se encuentra en sus vagones. Los tres automotores numerados del 1 al 3 y sus remolques 5 y 6 son los originales de 1913, fabricados por la casa zaragozana Carde & Escoriaza.
Además de la playa y la gastronomía balear, el tranvía de Sóller es uno de los iconos turísticos representativos de Mallorca. Un viaje en sus vagones descubre a los turistas el aroma del interior de Sóller y su última parada, ya en la bahía, es una ventana al mar donde poder iniciar otro viaje.
Metro Ligero Oeste: Un tranvía con acento argentino
En la orilla occidental del Río de la Plata se extiende la segunda ciudad por extensión de Sudamérica, Buenos Aires. Los orígenes del sistema tranviario de la ciudad se remontan a 1863, cuando comenzaron a transitar por sus calles los primeros tranvías de tracción animal.
El 25 de octubre de 1892 se realizan los primeros ensayos del tranvía eléctrico del país en ciudad de La Plata, la entonces capital de la provincia de Buenos Aires, pero habría que esperar otros cuatro años hasta el comienzo de la instalación de las primeras líneas. En 1908 ya eran doce las compañías que operaban en la ciudad, lo que le otorgó a la Buenos Aires el título de “La Ciudad de los tranvías”.
En los años veinte la red alcanza su máximo apogeo con 875 Km de vías y más de 3.000 vehículos, llegando a transportar 650.000.000 viajeros anuales.
Tras un periodo de declive y su posterior eliminación en 1961, la Asociación Amigos del Tranvía recuperó para la ciudad su histórico transporte en 1980 con el proyecto “Tramway Histórico de Buenos Aires”. Todos los fines de semana transporta viajeros de manera gratuita por el barrio porteño de Caballitos.
Esta asociación trabaja para conservar la importancia histórica del tranvía en la ciudad, custodiando este patrimonio. Este esfuerzo le valió el reconocimiento de la revista “Tramways and Urban Transit” como uno de los 12 hitos de los últimos 30 años.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de la fondue de queso
Corría el año 1880 cuando por la ciudad Suiza de Zurich comenzó a circular el primer tranvía de tracción animal.
Desde su electrificación hacia el 1890, la red tranviaria se ha convertido en la base de todo el sistema de transporte público de la ciudad, donde conviven viejos tranvías de los años 60, en perfecto estado de conservación, con material moderno de última tecnología.
Además de los trolebuses, autobuses y otros medios de transporte, el tranvía es el más utilizado con unas 15 líneas que recorren toda la ciudad. Es el medio de transporte ideal para sus casi 400.000 habitantes, ya que es rápido, limpio, silencioso y tiene calefacción en los asientos, durante el invierno.
Para los amantes de la gastronomía y en especial del queso, entre los meses de noviembre y febrero la compañía de transportes de Zurich organiza varias veces a la semana un tranvía de fondues, en el que los pasajeros pueden degustar una fondue de quesos mientras ven pasar las luces del casco antiguo de la ciudad.
Además, desde 2003 circula por la ciudad un "Cargotram" para facilitar la recogida de desechos voluminosos y chatarra de productos electrónicos pensado para aquellos ciudadanos que tengan dificultades para llevar estos desechos a los centros de reciclaje.
Metro Ligero Oeste: Nos subimos al tranvía para recorrer la historia de Friburgo
Friburgo de Brisgovia, o Freiburg en alemán, está considerada la capital ecológica de Alemania. Se encuentra en la región de Bayern-Wüttemberg, a orillas del río Rihn, haciendo frontera con Francia y Suiza y cerca de la famosa Selva Negra. Esta ciudad verde acoge el mayor número de instalaciones medioambientales de la Unión Europea.
Friburgo tiene una población de 215.000 habitantes que, en su mayoría, usan el transporte público una vez al día, siendo el tranvía uno de sus medios de transporte preferidos.
Las dos primeras líneas del tranvía se inauguraron el 14 de octubre de 1901. Actualmente, cuenta con 4 líneas, 64 estaciones y un total de 36 kilómetros de recorrido.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la ciudad se vio afectada por los ataques aéreos y en su reconstrucción los diferentes gobiernos municipales optaron por preservar los monumentos históricos aún en pie como iconos históricos de la ciudad y por peatonalizar el centro. Debido a estas decisiones, el transporte público se convirtió en la arteria que conecta todos los barrios.
En Friburgo no hay atascos ni ruidos, gracias a sus 29 km de carril bici y a su política de transportes y de urbanismo que evita que la ciudad crezca demasiado.
La catedral gótica de Friburgo es el mayor atractivo turístico de la ciudad junto con las tres puertas de entrada de su muralla. La parte antigua está recorrida por canales o riachuelos pensados en la Edad Media como una forma de abastecimiento de agua y desagüe y que se han convertido en seña de identificación histórica.
En este post hemos hecho referencia a la ciudad alemana de Friburgo, aunque también existe otra localidad con el mismo nombre en Suiza de la que hablaremos próximamente porque también tiene tranvía.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de la urbe más poblada del mundo
Tokio es una de las urbes más importantes del planeta y su área metropolitana está considerada como la más poblada del mundo, con casi 13 millones de habitantes. Además, es uno de los principales centros financieros y la capital política de Japón.
La región metropolitana de Tokio incluye a 23 barrios especiales que, hasta 1943, comprendían la Ciudad de Tokio propiamente dicha. Tokio también tiene 26 ciudades satélites, cinco pueblos, y ocho villas, cada uno de los cuales tiene gobierno propio.
En cuanto al transporte público, podemos decir que Tokio alberga el sistema de trenes de mayor complejidad en el mundo. El metro es el medio de transporte más utilizado, aunque también dispone de líneas de autobús y tren (la línea Yamamote que comunica las principales zonas de interés de la ciudad es utilizada cada día por más de 3,5 millones de personas).
A principios del siglo XX, el sistema de tranvía “Toden” era el principal medio de transporte de la ciudad, contando en su mejor momento con 41 rutas y más de 231 km de red de vías.
A mediados de siglo, el gobierno de Tokio comenzó a cambiar el sistema de transporte, dando un mayor protagonismo al metro y al autobús. Dicho cambio se aceleraría en 1960, coincidiendo con los preparativos para los Juegos Olímpicos de Tokio. Así, la mayoría de las líneas tranviarias se cerraron a principios de los 70 y la línea Toden Arakawa se mantuvo como la única superviviente, gracias a la oposición de los residentes en la zona.
En la actualidad, la línea Arakawa opera en la parte norte y este de la ciudad, una zona que pasa bastante desapercibida para la mayoría de los turistas, ya que éstos se concentran mayoritariamente en la zona comprendida entre los barrios de “Shibuya” y “Shinjuku”.
Metro Ligero Oeste: Un tranvía con sabor a jazz
Nueva Orleans es la ciudad más grande del Estado de Luisiana, en Estados Unidos, y el principal puerto del río Mississippi. En sus orígenes, fue colonia francesa para posteriormente ser cedida a España por el Tratado de París.
Urbe cosmopolita donde las haya, con influencia francesa, española, africana y latina, es también cuna del jazz y del movimiento jazzístico durante del siglo XIX y que, aún hoy, sigue atrayendo a miles de turistas todos los años por sus famosos festivales.
Uno de los iconos de la ciudad es su tranvía, que lleva en funcionamiento desde el 26 de septiembre de 1835, convirtiéndose en uno de los tranvías más antiguos en operación.
La más emblemática de sus líneas es la de St. Charles Avenue Line, con sus característicos tranvías antiguos como el Ford, Bacon & Davis de 1894 y otros vehículos de 1923 y 1924 que funcionan con total normalidad. Las otras tres líneas que dan cobertura al resto de la ciudad son la Canal Street Line, Riverfront Line y Loyola Line.
En 2005, con el fatídico episodio del huracán Katrina, se suspendieron temporalmente todos los servicios tranviarios, que fueron reconstruyéndose por tramos y rehabilitándose poco a poco. Así, con una inversión de más de 46 millones de dólares para la restauración de las vías y los vehículos, y más de 4 años de trabajos, en 2009 el servicio volvió a funcionar con total normalidad.
Hoy por hoy se están ampliando las cuatro líneas, con un último tramo inaugurado el pasado mes de enero.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de Praga.
La ciudad de Praga se sitúa a las orillas del río Moldava y cuenta con 1,2 millones de habitantes que hacen que sea la ciudad más poblada del país. Su casco histórico es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, desde 1992, lo que la convierte en una de las veinte urbes más visitadas del mundo.
Su tranvía se inauguró en el año 1875, por entonces era de tracción animal y estaba impulsado por caballos. Unos años más tarde, en 1901, se inaugura el primer tranvía eléctrico que perdura hasta hoy día.
La red de tranvías de Praga cuenta con 26 líneas diurnas y 9 nocturnas, 628 paradas y más de 550 kilómetros de vías. Además, es el único transporte público que está disponible a partir de la media noche.
Se ha convertido en el sello de la ciudad ya que cada año usan el tranvía alrededor de 300 millones de personas, más de 800.000 al día. Es el medio de transporte más utilizado gracias a la buena conexión entre líneas y la gran cobertura de éstas entre el casco histórico de la ciudad y las zonas periféricas más alejadas.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de la cuna de Italia, Turín
Situada al norte de Italia, en la región de Piamonte, Turín es un importante centro cultural y de negocios. La ciudad, que cuenta con más de 1 millón de habitantes, es conocida con el sobrenombre de “la Cuna de Italia” por ser el lugar de nacimiento de importantes políticos que contribuyeron a la unificación del país.
En lo referente a transportes, Turín fue pionera en Italia en implantar el sistema VAL en su ferrocarril metropolitano, un método en el que los vehículos ligeros están totalmente automatizados y no precisan de conductor para su control.
La red de tranvías, de más de dos siglos de antigüedad, cuenta con 8 líneas y unos 200 vehículos y constituye un medio de transporte esencial para las más de 640.000 personas que cada día se desplazan en transporte público.
Además, Turín posee un funicular único en Italia, el Tranvía de cremallera Sassi-Superga, que brinda a los turistas un viaje al pasado en vagones originales de época a travé
Metro Ligero Oeste: El tranvía de Lisboa
Los turistas que visitan Lisboa fotografían sin descanso los históricos tranvías amarillos que recorren el centro de la capital de nuestro país vecino. Esta preciosa ciudad portuguesa cuenta desde el año 1873 con un servicio de tranvías que originariamente eran arrastrados por caballos y que actualmente recorre la ciudad en cinco líneas con 110 paradas que suman una longitud total de 48 kilómetros.
La ruta más conocida es la 28, utilizada por los visitantes que quieren conocer el centro de la urbe y que acerca a algunos de los monumentos más conocidos de Lisboa: Estrela, el Palacio Sao Bento, Bairro Alto y Chiado, Baixa, Catedral da Sé, Castelo de Sao Jorge, entre otros. La ruta 15 también es muy interesante para los turistas, que la utilizan para llegar hasta la Torre de Belém. Completan la oferta los tranvías turísticos, pintados de un llamativo color rojo, que van hasta las Colinas y al Tajo, aunque son más caros que el resto de la red de transporte.
Los portugueses denominan a este medio de transporte “Carro Eléctrico”, y es vulgarmente conocido por “o elétrico”. Un total de 58 vehículos dan servicio a los viajeros desde las 6.30 hasta las 24 horas, siendo 40 de ellos históricos, 10 articulados y 8 ligeros. La empresa que se encarga de su explotación es Carris, la compañía municipal de transportes de Lisboa.
Metro Ligero Oeste: Burdeos y su tranvía sin catenarias
Esta vez nos vamos al sudoeste de Francia, concretamente a la ciudad de Burdeos, para conocer en profundidad un curioso tranvía que circula por sus calles.
Inaugurado en el año 2003, el tranvía de Burdeos está pensado y diseñado para ocasionar el menor impacto visual posible gracias a la ausencia de catenarias en parte de su recorrido. Utiliza el SAP (Sistema de Alimentación por Suelo), que incorpora un tercer raíl en el que solo la cara superior aflora a la calzada. Los vehículos alcanzan una velocidad de 17 kilómetros por hora y tienen capacidad para hasta 400 viajeros.
El tranvía, que había desaparecido de la aglomeración bordelesa en 1958 por decisión del alcalde de la época, se compone de 3 líneas con una longitud total de 43,9 km.
Los tranvías son gestionados, junto a las líneas de autobús en la red TBC, por la empresa Keolis que ha sustituido a Veolia transport. En una gran parte del recorrido las vías discurren por suelo con césped.
Con la puesta en marcha del tranvía en Burdeos, se realizó una importante reconversión urbanística del casco histórico. Adquirieron 3.000 bicicletas, restringieron el tráfico a los vehículos privados, incluyeron la renovación de los edificios principales y reorganizaron y embellecieron la vía pública.
Hoy día, este medio de transporte cuenta con unos 25.000 pasajeros a la hora y ha sido un referente para ciudades como Zaragoza o Córdoba.
Metro Ligero Oeste: El tranvía de Cracovia, un símbolo de historia
Situada en los márgenes del río Vístula, Cracovia es una de las ciudades más grandes, antiguas y hermosas de Polonia, además de uno de los centros económicos, científicos, culturales y artísticos más importantes del país. Aún hoy Cracovia es considerado el corazón de Polonia para muchos polacos, ya que durante gran parte de su historia fue la capital del país.
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1978, el centro histórico de Cracovia es considerado como uno de los más bellos del mundo. Dividido en tres zonas diferenciadas (la colina de Wawel, la ciudad medieval de Cracovia y el núcleo medieval de Kazimierz) recibe más de ocho millones de turistas al año. Entre sus joyas destacan monumentos como la Rynek Główny o plaza del mercado, la Iglesia de san Wojciech y otros tesoros nacionales como Sukiennice o el Castillo de Wawel.
Con más de 130 años de historia, el tranvía de Cracovia es un símbolo inconfundible de la ciudad. Tuvo su origen en 1882 y actualmente continúa en expansión. Su red está formada por una línea circular que rodea el casco histórico de la ciudad de la que parten las principales líneas por las calles más importantes hacia el extrarradio. Cualquier punto de la ciudad está conectado rápidamente con el centro.
Además se podría decir que Cracovia tiene los tranvías más curiosos, desde coches de segunda mano hasta tranvías de último modelo. Circulan coches de los años 70 traídos de Düsseldorf, antiguos E1 de Viena y modelos de Nüremberg de los años 60 y 70, además de modelos transformados del metro de Viena, tranvías Konstal de fabricación polaca de los años 80 de diseño soviético y modernos Bombardier.
Situado en las antiguas cocheras del barrio de Kasimierz, Cracovia cuenta además con el Museo del Tranvía. Allí se guardan tranvías de toda época en perfecto estado de conservación, y es punto de partida además de la línea 0, una línea turística con tranvías antiguos que circula ciertos días de verano.
Metro Ligero Oeste: Tranvías de San Francisco, patrimonio histórico y nacional
Situada en el estado de California, San Francisco está considerada como una de las ciudades más liberales de los Estados Unidos debido a que fue la cuna del conocido como “movimiento hippie”.
La ciudad es conocida por algunos de sus principales iconos como el puente Golden Gate, sus calles empinadas y sus tranvías, que se han convertido en todo un símbolo, pues casi son los únicos en funcionamiento en todo el país.
El transporte público en San Francisco lo gestiona la San Francisco Municipal Railway (conocido como Muni). Sus tranvías, también conocidos como Cable Cars, cuentan con más de 138 años de historia y han sido reconocidos como Patrimonio Histórico Nacional.
El 2 de agosto de 1873 se realizaron las primeras pruebas de funcionamiento de los tranvías en una de las cuestas de San Francisco y el 1 de septiembre del mismo año se inauguró la primera línea Clay Street.
Pero el terremoto que asoló la ciudad en 1906 dañó considerablemente el sistema de cables y varias líneas fueron sustituidas por autobuses, quedando solamente ocho líneas en activo.
En 1981, gracias a una inversión de más 65 millones de dólares, se realizó una restauración del sistema, cuya reinauguración supuso una gran celebración para la ciudad.
En la actualidad, la red tranviaria se compone de 28 vehículos simples y 14 dobles y más de 25 kilómetros de extensión. El sistema dispone de tres líneas: Powell & Hyde, Powell & Mason y California que transportan más de 10 millones de personas al año.
Metro Ligero Oeste: Ámsterdam, la ciudad de los canales y los tranvías
En los Países Bajos entre canales, puentes y pinacotecas, se erige una ciudad con un encanto especial marcado por la sencillez de sus gentes, el romanticismo de sus bulevares y la historia reflejada en sus monumentos y calles.
Se trata de una ciudad con mentalidad cosmopolita caracterizada por una activa vida empresarial en la que numerosas multinacionales han fijado su sede.
Ámsterdam cuenta con un eficiente sistema urbano de transporte. Aunque el medio de transporte por excelencia es la bicicleta, el tranvía es el segundo vehículo más usado por delante de autobuses urbanos y coches.
Los tranvías son los dueños de las calles en Ámsterdam ya que son muy pocas las personas que utilizan los vehículos privados, principalmente por problemas de aparcamiento.
La ciudad, que cuenta con una población de unos 740.000 habitantes, está dotada de un servicio de tranvías muy eficiente que diariamente realiza un millón de viajes gracias a sus más de 230 tranvías que se distribuyen en 16 líneas.
El servicio es municipal, pero está operado por GVB (Gemeentelijk Vervoerbedrijf), compañía que gestiona el transporte local y que cumplió 100 años de servicio en el año 2000.
La historia del tranvía en la ciudad se remonta a enero del año 1900, cuando se inaugura el primer tranvía municipal, pero no fue hasta el mes de agosto de este mismo año cuando se condujo el primer tranvía eléctrico. La electrificación de toda la red de tranvías se completó en 1916.
En el año 2000, Ámsterdam realizó el mayor pedido de tranvías Combino de Siemens con el encargo de 95 vehículos. Se trata de unidades de cinco coches, con una longitud de 29 metros y una capacidad de transporte de 120 plazas, 67 de ellas sentadas. La primera unidad de Combino comenzó a circular en la ciudad en 2001.
Metro Ligero Oeste: Berlín, una visión histórica a través de sus tranvías